A un periodista hondureño que recibió una amenaza el 21 de abril lo han seguido dos hombres en una motocicleta. Además, se han efectuado disparos delante de su casa. Otro periodista ha hablado también a Amnistía Internacional de las amenazas que ha recibido en las últimas semanas. La mañana del 28 de abril, a Ricardo Oviedo, periodista de televisión y presidente la Asociación de Comunicadores de Colón, en el noreste de Honduras, lo siguieron dos hombres en una motocicleta amarilla sin placas se matrícula cuando se marchaba de la oficina en la que había asistido a una reunión. Esos mismo hombres ya le habían seguido anteriormente hasta su casa y habían sido vistos rondando por la zona ante su casa en una motocicleta. Ricardo Oviedo se alarmó tanto que detuvo su motocicleta y buscó refugio en las oficinas de una ONG, en lugar de continuar su viaje. Durante la tarde anterior, alguien había estado efectuando disparos ante su casa. El 21 de abril había recibido una amenaza de muerte (véase AU original).Amnistía Internacional acaba de tener conocimiento de amenazas contra otro periodista. El 14 de abril, Gerardo Chévez, periodista de la emisora Radio Progreso, con sede en el municipio de El Progreso, en el norte de Honduras, recibió una amenaza por mensaje de texto (SMS). La amenaza hacía referencia al homicidio, cometido el día anterior, del periodista radiofónico Luis Antonio Chévez Hernández en la ciudad septentrional de San Pedro Sula. El mensaje decía: "Estamos acabando con los Chévez. Luego vamos con los curas". Gerardo Chévez no está emparentado con Luis Antonio Chévez Hernández, aunque compartan apellido. El director de Radio Progreso es un sacerdote jesuita, el padre Ismael Moreno. Gerardo Chévez había recibido anteriormente, el 29 de marzo, una amenaza de muerte mediante mensaje de texto que decía: "ja ja ja le estamos quebrando el culo a los periodistas a la mierda como vos". Gerardo Chévez ha informado recientemente sobre actos organizados por el movimiento de oposición Resistencia, y también sobre la presunta corrupción local.ESCRIBAN INMEDIATAMENTE, en español o en su propio idioma, pidiendo a las autoridades hondureñas que:
  • condenen públicamente los homicidios y la intimidación de periodistas y se comprometan a proteger a los miembros de esta profesión;
  • actúen de inmediato para brindar toda la protección necesaria a Ricardo Oviedo, Gerardo Chévez y otros periodistas amenazados, de acuerdo con sus deseos;
  • lleven a cabo una investigación urgente, exhaustiva e imparcial sobre los homicidios de los seis periodistas y las amenazas contra otros periodistas, hagan públicos sus resultados y lleven a los responsables ante la justicia;
  • apliquen todas las órdenes de protección dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
ENVÍEN LLAMAMIENTOS, ANTES DEL 11 DE JUNIO DE 2010, A:Sr. Porfirio Lobo SosaPresidente de la RepúblicaCasa PresidencialBoulevard Juan Pablo SegundoPalacio José Cecilio del ValleTegucigalpa, HondurasFax: + 504 232 1666Tratamiento: Sr. PresidenteSr. Luis Alberto RubíFiscal General de la RepúblicaLomas del Guijarro, Avenida República DominicanaEdificio Lomas Plaza IITegucigalpa, HondurasFax: + 504 221 5667Tratamiento: Sr. Fiscal GeneralY copia a:ONGComité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH)Barrio La Plazuela, Avenida Cervantes, Casa No. 1301Apartado Postal 1243Tegucigalpa, HONDURASFax:+504 220 5280 (digan: "tono de fax")INFORMACIÓN ADICIONALEl 1 de marzo, Joseph Hernández Ochoa, periodista y estudiante de 26 años, fue abatido a tiros en Tegucigalpa. Fue la primera víctima de la reciente oleada de homicidios de periodistas. Su colega, la periodista Carol Cabrera, resultó herida en ese mismo ataque. El 11 de marzo, el periodista radiofónico David Meza Montesinos murió a manos de atacantes no identificados que siguieron a su auto y le dispararon cuando se dirigía a su casa. Había estado investigando sobre el narcotráfico y llevaba varias semanas recibiendo amenazas telefónicas. Tres días después, Nahúm Palacios, director de informativos de la emisora de televisión Canal 5, fue asesinado mientras conducía por la ciudad de Tocoa, departamento de Colón. Había estado investigando una disputa de tierras en la región de Aguán y también había informado sobre narcotráfico. El 24 de julio de 2009, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos había pedido a Honduras que tomara medidas inmediatas para protegerlo, pero las autoridades no emprendieron ninguna acción. Víctor Manuel Juárez y José Bayardo Mairena trabajaban para el programa informativo "Así es Olancho", en el departamento de Olancho, en el este de Honduras. Les dispararon desde otro vehículo el 27 de marzo mientras circulaban por una carretera de Olancho.Tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009, se produjeron cierres y ocupaciones de medios de comunicación por parte de personal militar, se golpeó y agredió físicamente a periodistas, y se amenazó e intimidó a periodistas, especialmente los que investigaban actividades de la delincuencia organizada o violaciones de derechos humanos o condenaban abiertamente el golpe de Estado. Amnistía Internacional, en un informe titulado Honduras: Recomendaciones al nuevo gobierno de Honduras tras el golpe de Estado de junio de 2009 (Índice: AMR 37/003/2010), documentó violaciones de derechos humanos cometidas durante el golpe de Estado.El 27 de enero de 2010 ocupó el poder un nuevo gobierno encabezado por Porfirio Lobo. Ahora, con seis homicidios de periodistas en tan sólo dos meses, el gobierno debe tomar medidas urgentes e inmediatas para proteger a los periodistas que reciben amenazas, prevenir nuevas muertes e investigar y llevar ante la justicia a los culpables de estos asesinatos.