Tras 50 años de trayectoria, Amnistía Internacional ha enfrentado amenazas de derechos humanos procedentes de muy diversos ámbitos, como aquellas de las empresas petroleras que operan en el delta del Níger. Por muchas décadas la extracción del delta de Níger ha generado mas de $600 billones de dolares. Sin embargo, la mayoría de la población del Delta vive en extrema pobreza. Esta pobreza se intensifica por la contaminación ambiental ya que el 60 por ciento de la población depende de su entorno natural para sobrevivir.Millones de personas no tienen acceso a agua potable debido a los derrames de petroleo, el vertimiento de desechos y las llamas de gas. Otros efectos negativos han sido peces contaminados con petroleo, cosechas destruidas y problemas respiratorios. La respuesta del gobierno de Nigeria y de las empresas petroleras ha sido inadecuada o inexistente. Ya es el momento de exigir una limpieza total del delta del Níger para una población que ha sufrido demasiado. La industria petrolera debe limpiar el producto de sus acciones, y el gobierno debe hacerle rendir cuentas.En 2008, una negligencia de Shell causó dos vertidos que contaminaron una región del Delta del Níger. El vertido destrozó la zona, echando a perder las tierras y los ríos y aumentando la pobreza de la población. A pesar de los enormes beneficios que tiene como empresa, Shell se niega a reconocer el desastre, a limpiar la zona y a pagar las indemnizaciones. ¡AYÚDANOS A CONSEGUIR QUE PAGUE Y LIMPIE!Participa en la acción http://www.amnesty.org/es/appeals-for-action/shell-que-admita-pague-y-limpie