Señor Presidente Trump:
Le instamos a respetar los derechos humanos de las personas inmigrantes y las que buscan seguridad en Estados Unidos y a abandonar todos los planes de deportación masiva. El gobierno estadounidense tiene la obligación, en virtud del derecho internacional, de garantizar que sus leyes, políticas y prácticas no ponen en un peligro mayor de sufrir abusos contra los derechos humanos a las personas inmigrantes y las que buscan seguridad. Mientras que Estados Unidos, como todos los países, tiene la facultad de regular la entrada y la estancia de personas no ciudadanas en su territorio, sólo puede hacerlo dentro de los límites de sus obligaciones de derechos humanos.
Una campaña de deportación masiva violará múltiples derechos, incluida la protección frente a la devolución a un país en el que la gente corre un peligro real de sufrir tortura y otros daños graves a sus derechos humanos (refoulement), el derecho a pedir asilo, el derecho a no sufrir detención arbitraria, el derecho al debido proceso, el derecho a la unidad familiar, los derechos de la infancia y el derecho a no sufrir discriminación. También destrozará comunidades, familias, y la economía.
Le pido que:
Le ruego que abandone la demonización de las personas inmigrantes y las que buscan seguridad y anule sus planes de deportación masiva.
El presidente estadounidense Donald Trump ha prometido llevar a cabo una campaña de deportación masiva dirigida a millones de inmigrantes y personas que buscan seguridad. Sus planes se basarán en detenciones, reclusiones y deportaciones masivas tanto de personas que forman parte de la comunidad desde hace mucho tiempo como de personas recién llegadas. Esto privará a la gente de la oportunidad de pedir protección, la someterá a detención arbitraria, devolverá a personas a situaciones de peligro, separará a familias, destrozará comunidades, someterá a personas al uso de perfiles raciales, propagará el miedo y socavará la seguridad, prosperidad y dignidad humanas.
Una campaña de deportación masiva violará múltiples derechos, incluida la protección frente a la devolución a un país en el que la gente corre un peligro real de sufrir tortura y otros daños graves a sus derechos humanos (refoulement), el derecho a pedir asilo, el derecho a no sufrir detención arbitraria, el derecho al debido proceso, el derecho a la unidad familiar, los derechos de la infancia y el derecho a no sufrir discriminación. También destrozará comunidades, familias, y la economía.
Por eso pedimos que se: