Amnistía Internacional. Estado peruano obstaculiza acceso de niñas al aborto terapéutico

Lima, 27 de septiembre de 2023.

En 2023 el Estado peruano sigue negando el derecho al aborto terapéutico de numerosas niñas, quienes a pesar de haber sido violentadas sexualmente, son revictimizadas y se convierten en madres a su corta edad. A vísperas del Día de Acción Global por un Aborto Legal, Seguro y Gratuito, que se conmemora el 28 de septiembre, cada día cuatro menores de 15 años son obligadas a ser madres en el país. Amnistía Internacional condena esta situación, demanda que se garantice el aborto terapéutico en todos los casos de embarazo infantil, y recuerda que forzar a una niña a ser madre puede ser considerado tortura.

Según cifras oficiales, el número de menores de 10 a 14 años que se convierten en madres en Perú va en aumento, y pasó de 1 429 en 2021 a 1 619 en 2022.  A pesar de estos alarmantes indicadores, y de que la evidencia científica muestra que una niña tiene más riesgo de morir durante el parto que una mujer adulta, desde el Estado se incrementan las barreras normativas para que puedan acceder a su derecho a un aborto terapéutico.

La organización ve con preocupación el avance de propuestas antiderechos, así como proyectos de ley que bajo las premisas de promover la protección del embarazo, de la madre gestante, del niño por nacer, o de reconocer derechos al concebido, obstaculizarían aún más el derecho de las niñas a acceder a un aborto terapéutico, reforzando el círculo de violencia en el cual se encuentran.

En junio de este año el Comité de los Derechos del Niño de la ONU condenó al Estado peruano por vulnerar los derechos a la salud y a la vida de Camila, niña indígena víctima de violación desde los 9 años, a quien se le obligó a continuar un embarazo, siendo revictimizada y criminalizada por las autoridades que debían protegerla, caso que ilustra el drama que atraviesan muchas niñas embarazadas y sus familias en Perú.

El caso de Camila debe marcar un precedente y abrir paso a cambios estructurales para que las niñas en Perú no sean forzadas a ser madres ni sean víctimas de violencia sexual. El Estado no puede seguir permitiendo que a las niñas en el país las violen, les nieguen el acceso al aborto terapéutico, las criminalicen, y las obliguen a ser madres. María Paz de la Cruz, Coordinadora de Campañas de Amnistía Internacional Perú

“El caso de Camila debe marcar un precedente y abrir paso a cambios estructurales para que las niñas en Perú no sean forzadas a ser madres ni sean víctimas de violencia sexual. El Estado no puede seguir permitiendo que a las niñas en el país las violen, les nieguen el acceso al aborto terapéutico, las criminalicen, y las obliguen a ser madres”, señaló María Paz de la Cruz, Coordinadora de Campañas de Amnistía Internacional Perú.

En tal sentido, la organización demanda al Estado peruano el cumplimiento del dictamen del Comité de los Derechos del Niño de la ONU, despenalizando el aborto en todos los supuestos de embarazo infantil, asegurando el acceso a servicios de aborto seguro, y modificando la normativa que regula el acceso al aborto terapéutico, para que se garantice la consideración especial de riesgo para la salud y la vida que implica el embarazo infantil.

NOS MOVILIZAMOS POR UN ABORTO SEGURO

Este 28 de septiembre Amnistía Internacional se suma a las movilizaciones en diferentes regiones del país, exigiendo al Estado peruano la despenalización total del aborto para todas las personas gestantes, especialmente en todos los supuestos de embarazo infantil, asegurando el acceso a servicios de aborto seguro, y garantizando el acceso de las personas a sus derechos sexuales y reproductivos y a la educación sexual integral.

“Las niñas deben estudiar, jugar, tener actividades recreativas propias de su edad, como factores primordiales de su desarrollo, pero sobre todo, no ser forzadas a ser madres. El Estado peruano debe protegerlas y garantizar que puedan desarrollar sus proyectos de vida. No podemos permitir que se tolere el embarazo infantil y que las niñas se conviertan en madres en este país, sin importar su salud física y mental”, sostuvo Yuly del Pilar Quispe Cusacani, presidenta de Amnistía Internacional Perú.

Las niñas deben estudiar, jugar, tener actividades recreativas propias de su edad, como factores primordiales de su desarrollo, pero sobre todo, no ser forzadas a ser madres. El Estado peruano debe protegerlas y garantizar que puedan desarrollar sus proyectos de vida. No podemos permitir que se tolere el embarazo infantil y que las niñas se conviertan en madres en este país, sin importar su salud física y mental, Yuly del Pilar Quispe Cusacani, presidenta de Amnistía Internacional Perú
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