(Lima, 27 de septiembre de 2022). Este 28 de septiembre, desde Amnistía Internacional nos sumamos al Día de Acción Global por un Aborto Legal, Seguro y Gratuito, y exigimos a las autoridades despenalizar el aborto en Perú, derogándose todas las normas que lo criminalizan, y rechazando aquellas iniciativas que pretenden obstaculizar aún más el derecho de las gestantes a decidir sobre sus cuerpos.

La organización ve con mucha preocupación que, en lugar de garantizar un aborto seguro, a través de servicios de salud reproductiva universales, accesibles y oportunos, y una educación con enfoque de género, que asegure el derecho a la educación sexual integral, en el Congreso de la República avancen proyectos de ley para restringir el derecho a un aborto seguro.

El PL 1520/2021, que promueve la protección del embarazo, de la madre gestante, del niño por nacer y de su entorno familiar, pone en riesgo el derecho de las gestantes a la salud y al aborto terapéutico. Además, el PL 785/2021, al buscar “reconocer derechos al concebido”, penalizaría aún más el derecho a acceder a un aborto seguro.

“El aborto es un derecho humano. Es indispensable proteger la autonomía de nuestros cuerpos y nuestra dignidad, como parte del ejercicio de nuestros derechos sexuales y reproductivos. Debemos regular el acceso al aborto como cualquier otro servicio de atención médica, para evitar prácticas inseguras que en tantos casos cuestan la vida”, sostuvo María Paz de la Cruz, coordinadora de Campañas de Amnistía Internacional Perú. 

Según cifras oficiales, en 2021 un total de 1 435 niñas menores de 14 años se convirtieron en madres en Perú, siete de ellas menores de 10 años. Aun cuando han sido víctimas de violencia sexual y el embarazo supone un grave riesgo para sus vidas, ellas son forzadas a ser madres. 

Si bien en Perú, el aborto terapéutico es legal cuando es el único medio para salvar la vida de la gestante o evitar un mal grave y permanente en su salud, este derecho sigue siendo otorgado a discreción y está seriamente limitado por consideraciones religiosas, morales, temor a represalias, entre otros factores. 

“No podemos seguir de espaldas al grave problema de salud pública y de derechos humanos que supone que miles de mujeres aborten en la clandestinidad y en condiciones muy precarias, situación que se agrava en grupos de personas en condiciones de pobreza y extrema pobreza. Es una situación sumamente discriminatoria”, dijo Alana Viera, activista de Amnistía Internacional Perú.

La organización recuerda a las autoridades que el acceso a un aborto seguro es un derecho humano. Por ello, exige al Estado peruano despenalizar el derecho a decidir de las personas gestantes y dejar de sancionar y perseguir a quienes facilitan el acceso a esta práctica, entre ellos operadores de salud.

Nos movilizamos por un aborto libre, seguro y gratuito

Amnistía Internacional se sumará este 28 de septiembre a las movilizaciones en diferentes ciudades del país para exigir aborto libre, seguro y gratuito. En Trujillo, participaremos a las 6:00 pm en una performance en la Plaza de Armas, y en Lima participaremos en la marcha que partirá desde la Plaza San Martín a las 6:00 p.m.