En respuesta al asalto de las fuerzas de seguridad al domicilio de Mohamed al Kassas, vicepresidente del partido de oposición egipcio Misr al Qawia, y a la falta de información sobre su paradero, la directora de campañas de Amnistía Internacional para el norte de África, Najia Bounaim, ha declarado:
“Dado el historial de las autoridades egipcias y su constante uso de la desaparición forzada para reprimir la disidencia, nos preocupa mucho que Mohamed al Kassas pueda haber sido sometido a desaparición forzada y sea víctima de tortura. Las autoridades deben revelar cualquier información de que dispongan sobre el paradero de Mohamed al Kassas y ponerlo en libertad de inmediato si está bajo la custodia del Estado.”
“Esta desaparición forzada de un alto cargo de un destacado partido de oposición es un descarado ataque contra los derechos de libertad de expresión y asociación en Egipto. La desaparición forzada se ha convertido en una práctica habitual de la administración del presidente Al Sisi para silenciar a los activistas y los grupos de la oposición.”
Se trata de la tercera desaparición forzada que Amnistía Internacional confirma en Egipto esta semana. El lunes 4 de febrero fue el último día del que se tuvieron noticias del periodista Mustafa al Assar y su compañero de vivienda, el activista Hassan al Banna Mubarak, que se dirigían a su trabajo en Guiza. Hasta hoy se desconoce la suerte y el paradero de ambos. Hace un mes, la Agencia de Seguridad Nacional del Ministerio del Interior citó al hermano de Al Assar para interrogarlo sobre el paradero y las actividades de éste.
A pesar de las numerosas denuncias presentadas por familiares y abogados, las autoridades egipcias se han negado a revelar el paradero de los desaparecidos.
En enero de 2018, el ex jefe del Estado Mayor del Ejército, Sami Anan, fue detenido tras haber declarado su intención de presentarse a las próximas elecciones presidenciales.