Amnistía Internacional ha instado a las autoridades egipcias a que refrenen a las fuerzas de seguridad para impedir nuevas muertes de manifestantes en las protestas que continúan teniendo lugar en todo el país.Millares de personas se han sumado en los últimos días a las manifestaciones contra la pobreza, los abusos policiales y la corrupción que vienen celebrándose en todo Egipto."Las autoridades egipcias debe refrenar a las fuerzas de seguridad para impedir el derramamiento de sangre -ha manifestado Hassiba Hadj Sahraoui, directora adjunta del Programa de Amnistía Internacional para Oriente Medio y el Norte de África-. No pueden continuar basándose en el estado de excepción vigente desde hace 30 años para imponer una prohibición absoluta de las manifestaciones públicas y conceder a las fuerzas de seguridad amplios poderes de detención y registro."Amnistía Internacional ha afirmado que debe respetarse el derecho a organizar manifestaciones y participar en ellas sin sufrir intimidaciones, violencia ni riesgo de detención y procesamiento.Anoche se interrumpieron las líneas de comunicación con gran parte de Egipto y quedaron cortadas las conexiones de Internet y los servicios de telefonía móvil.Esta misma semana se habían interrumpido ya los servicios SMS, Twitter y Bambuser, y también se habían desactivado las cuentas de telefonía móvil de destacados activistas de los derechos humanos."Con la drástica medida de impedir el flujo de información entre los ciudadanos egipcios, las autoridades han dado muestra de hasta qué extremos están dispuestas a llegar para eliminar el derecho de manifestación pacífica", ha señalado Hassiba Hadj Sahraoui.Amnistía Internacional ha condenado el uso desproporcionado e innecesario de munición real y medios letales contra los manifestantes por parte de las fuerzas de seguridad egipcias, que, según informes, ayer fue causa de la muerte de otro manifestante.La organización ha recibido información según la cual un joven de 22 años, Ahmed Atef, murió ayer en el norte del Sinaí al abrir fuego las fuerzas de seguridad en la localidad de Sheikh Zuweid contra una multitud de más de un millar de manifestantes. La información disponible indica que en la localidad nororiental de Suez resultaron muertas siete personas participantes en las protestas.
Son ya al menos ocho las personas muertas en los disturbios populares que se suceden en todo Egipto desde el martes y muchas más la heridas.Las fuerzas de seguridad han detenido al menos a 1.120 manifestantes, según cifras recogidas ayer por abogados y organizaciones de derechos humanos.Varios manifestantes que han estado detenidos han contado a Amnistía Internacional que los golpearon al detenerlos y estando bajo custodia en centros de los servicios de Seguridad Central, y que les negaron la debida atención médica.Ayer se detuvo a ocho altos cargos de la Hermandad Musulmana, entre ellos Eissam Aryan y Mohamed Cursi, y a otros 20 dirigentes de la organización en distintas gobernaciones.
Información complementariaSegún del derecho internacional, la policía sólo puede hacer uso de la fuerza si es estrictamente necesario y en la medida en que lo exija el cumplimiento de su deber. En particular, no debe utilizar armas de fuego contra personas, excepto en defensa propia o de terceros ante el riesgo inminente de muerte o lesión grave.Se ha acusado a los manifestantes de actos delictivos como reunirse, agredir a las fuerzas de seguridad, dañar bienes públicos e interrumpir el tráfico. Las autoridades egipcias utilizan a menudo estos cargos para reprimir la libertad de reunión y negar a los ciudadanos el derecho de manifestación pacífica.