A 3 años de la implementación del Sistema de Búsqueda de Personas Desaparecidas, se hace cada vez más evidente la necesidad de contar con un protocolo de actuación específico con enfoque de género para el caso de mujeres desaparecidas.
En el Perú, entre 2020 y octubre de 2023 (72,601) personas fueron reportadas como desaparecidas. Son el 63% del total de denuncias por desaparición. A 3 años de la puesta en funcionamiento del (nuevo) Sistema de Búsqueda de Personas Desaparecidas, que se lanzó el 15 de octubre del 2020, analizamos su implementación con un foco especial en la atención de casos de mujeres desaparecidas. A pesar de que se han podido identificar algunos esfuerzos puntuales, persisten serias deficiencias en la atención institucional de esta problemática, que podrían traducirse en obstáculos en el acceso a la justicia.
El Sistema de Búsqueda de Personas Desaparecidas se presentó como una serie de herramientas para mejorar la atención de casos de personas desaparecidas, que incluye el Registro Nacional de Personas Desaparecidas (RENIPED), el Portal de Personas Desaparecidas, la Línea 114 y el Sistema de Mensajería de Alerta Temprana de Emergencia (SISMATE). Sin embargo, desde el 2020 mantiene un defecto de origen: la falta de enfoque de género para la atención de casos de mujeres desaparecidas, quienes conforman casi dos tercios de las personas que son reportadas como desaparecidas, y que en su mayoría son niñas y adolescentes.
Aunque en el Perú la desaparición no es un delito, esta puede encontrarse íntimamente vinculada con la comisión de delitos. En el caso específico de mujeres desaparecidas, ellas corren un alto riesgo de ser víctimas de trata de personas, violencia sexual o feminicidio. De acuerdo a la Defensoría del Pueblo, la única institución que mantiene un registro público sobre el vínculo entre desaparecidas y la comisión de uno de estos delitos, el 23% de las víctimas de feminicidio entre enero y julio de 2023 habían sido reportadas previamente como desaparecidas (22 de los 96 casos).
Preocupadas por la persistencia de estas cifras y continuando con la campaña Búscalas, desde Amnistía Internacional y el Centro de la Mujer Peruana Flora Tristán hacemos este reporte para llamar la atención sobre la urgencia de contar con un sistema especializado a nivel nacional en la búsqueda de mujeres con enfoque interseccional.
Un sistema especializado con enfoque de género. Las cifras siguen demostrando que quienes desaparecen en nuestro país son principalmente mujeres. Es urgente la implementación de un sistema especializado a nivel nacional en la búsqueda de mujeres, que parta del reconocimiento de la violencia estructural que afrontan cada día, y que incluya un enfoque interseccional y territorial
Cooperación interinstitucional e interoperabilidad. Se necesita operativizar de manera eficiente la colaboración entre instituciones, tanto desde los CEM, centros de salud, puntos de control migratorio y empresas de telecomunicaciones privadas. La CFORDES es un esfuerzo importante por realizar acciones interinstitucionales, pero requiere de la voluntad política de cada sector involucrado para incluir herramientas que faciliten el proceso de búsqueda y, sobre todo, el intercambio de información.
Recursos suficientes y personal especializado a nivel nacional. Es fundamental que las dependencias policiales cuenten con todas las herramientas disponibles para la búsqueda de personas desaparecidas, y conozcan las técnicas de investigación que han sido desarrolladas por divisiones especializadas como la DIVIBPD, que ha mostrado mayor efectividad en la búsqueda. Para ello, es necesario crear la institucionalidad suficiente que permita a esta división especializada desarrollar una dirección desconcentrada, principalmente en las zonas de mayor peligro para las mujeres que se reportan como desaparecidas
Capacitación. Fortalecer la capacitación de las funcionarias y los funcionarios que participan en la recepción de denuncias e investigación de casos de desaparición de mujeres, tanto a nivel policial, como fiscal y personal de los CEM. Esta capacitación debe ser permanente, con enfoque de género y derechos humanos, considerando la multiplicidad de herramientas y diligencias disponibles para una respuesta célere y efectiva, que resulte en la pronta ubicación de la persona desaparecida.
Información y estadística. Es necesario que se continúe ahondando en las causas de la desaparición de mujeres, niñas y adolescentes, al tratarse de un grupo en especial situación de riesgo. Con el análisis de esta información, desde los diferentes sectores y actores involucrados, se podrá generar mayor entendimiento del problema y, por tanto, mejores estrategias de atención y prevención. En este punto, es crucial incluir nuevas categorías en el RENIPED, empezando por el cruce de edad con género, lo cual permitirá saber la cifra de niñas, adolescentes y mujeres adultas que se encuentran en condición de desaparecidas. También es importante que se incluya si los casos de mujeres ubicadas sin vida están relacionados con la comisión de un delito.
Seguimiento de casos. Es importante que se identifiquen de manera organizada los casos que llegan a investigación fiscal precedidos de desaparición. De esa manera, es posible conocer el riesgo real en que las mujeres se encuentran. La data brindará información para prevenir los casos y mejorar la búsqueda en aquellas circunstancias de desaparición que estarían configurando un delito.
mujeres fueron víctimas de feminicidio en Perú durante el 2019.
de las víctimas de feminicidio entre enero y julio de 2023 habían sido reportadas previamente como desaparecidas.
casos de desaparición fueron atendidos entre enero y agosto, de acuerdo a información brindada por el Programa Aurora.
Todos los años dan a luz más de 14 millones de adolescentes, debido principalmente a relaciones sexuales forzosas y embarazos no deseados.