Amnistía Internacional ha instado hoy a las nuevas autoridades libias a garantizar una investigación exhaustiva, independiente e imparcial sobre la manera en que murió el coronel Muamar al Gadafi, y ha manifestado que, si lo mataron deliberadamente en cautividad, su muerte constituiría un crimen de guerra.Las imágenes de vídeo que surgieron ayer parecen mostrar que el coronel Gadafi estaba vivo cuando fue capturado ayer mismo en Sirte por las tropas contrarias a él."Si al coronel Gadafi lo mataron tras capturarlo, su muerte constituiría un crimen de guerra, y los responsables deberían comparecer ante la justicia", ha manifestado Claudio Cordone, director general de Amnistía Internacional."El investigar si su muerte fue un crimen de guerra o no puede ser una decisión impopular. Sin embargo, el Consejo Nacional de Transición debe aplicar las mismas normas a todos, y debe otorgar justicia incluso a aquellos que se la negaron categóricamente a los demás.""Si Gadafi hubiera sido procesado, sus víctimas habrían podido finalmente saber por qué fueron blanco de sus ataques, y habrían tenido la oportunidad de recibir justicia y reparación."Una investigación ayudaría a aclarar muchos de los informes contradictorios que han circulado en torno a la suerte corrida por el coronel Gadafi después de que su localidad natal, Sirte, cayera bajo el control del Consejo Nacional de Transición.Si el Consejo Nacional de Transición no puede garantizar una investigación independiente e imparcial, dicha investigación debe ser llevada a cabo por órganos internacionales tales como la Corte Penal Internacional (CPI) o los mecanismos de derechos humanos de la ONU. La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos ha pedido también hoy que se investigue la muerte del ex dirigente libio.El primer ministro libio Mahmoud Jibril declaró que Gadafi había recibido un disparo mortal en la cabeza durante el fuego cruzado. Sin embargo, otros miembros del Consejo Nacional de Transición dijeron a los medios de comunicación que el ex dirigente había muerto desangrado camino del hospital, o que había muerto a manos de combatientes tras ser capturado.De igual modo, han aparecido vídeos que muestran al hijo del coronel, Mutasim Gadafi, capturado también ayer, tendido en una cama de lo que parece ser un domicilio particular. Vestido con una camiseta ensangrentada, se le aprecia una herida en el cuello, pero parece estar consciente y darse cuenta de lo que le rodea. En imágenes posteriores se ve su cuerpo sin vida en una cama de hospital. Su muerte debe ser asimismo objeto de una investigación independiente.Un médico libio que examinó los cadáveres ha dicho a los medios de comunicación que tanto el coronel Gadafi como su hijo murieron por heridas de bala.Durante meses, Amnistía Internacional ha pedido a todos los bandos del conflicto armado libio que respeten el derecho internacional humanitario, y ha instado al Consejo Nacional de Transición a proteger a los partidarios de Gadafi capturados frente a posibles ataques en venganza u otras represalias.La organización pidió reiteradamente al Consejo Nacional de Transición que, si los capturaba, entregara al coronel Muamar al Gadafi, a su hijo Saif al Islam al Gadafi y a Abdullah al Senusi sanos y salvos a la CPI para que fueran juzgados sin demora. En junio, la CPI dictó órdenes de detención contra los tres por dos cargos de crímenes de lesa humanidad.Existen informes contradictorios sobre si Saif al Islam y Abdullah al Senusi permanecen en libertad o han sido también capturados o muertos.Si han sido capturados, el Consejo Nacional de Transición debe garantizar que los dos -y todos los sospechosos de crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y otros delitos de derecho internacional- reciben un trato humano y son procesados en juicios justos.Abusos cometidos en el pasadoLa ejecución extrajudicial de opositores, tanto en su país como en el extranjero, fue uno de los rasgos característicos del gobierno de Gadafi en Libia. La práctica se conocía como "liquidación de perros callejeros" -como se denominaba a quienes criticaban la Revolución de al Fatah de 1969- y contaba con la aprobación de las más altas instancias del gobierno. Las autoridades se negaban a investigar las denuncias a este respecto.Durante décadas, la población libia fue sometida a graves violaciones de derechos humanos en nombre de la protección de la Revolución de al Fatah. Ahora corresponde al Consejo Nacional de Transición romper realmente con el legado de abusos y represión del gobierno del corone Gadafi. Así lo ha manifestado Amnistía Internacional."La nueva Libia debe basarse en el respeto de los derechos humanos y en la justicia, no en la venganza por los agravios del pasado", ha declarado Claudio Cordone."Las autoridades libias deben derribar los obstáculos a la justicia que caracterizaron los 42 años de brutal régimen de Gadafi, y deben garantizar que todos aquellos sobre los que existan sospechas razonables de que han cometido abusos tanto en la actualidad como en el pasado son procesados de acuerdo con las normas internacionales sobre juicios justos.""La reforma del sistema de justicia para garantizar su independencia y su capacidad de proporcionar remedio a las víctimas debe ser una de las principales prioridades del Consejo Nacional de Transición. La ausencia de dicha reforma arrojará una sombra de duda sobre el compromiso y la capacidad del Consejo de defender y respetar el Estado de derecho y los derechos humanos."