(Lima, 26 de junio de 2019). En Perú, las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersex (LGBTI), no pueden ejercer su derecho a vivir una vida libre de discriminación y violencia. Los prejuicios, el estigma y los estereotipos alimentan la homofobia y la transfobia, lo que a su vez crea barreras al acceso a servicios de salud integrales, educación, trabajo y vivienda.

Según la Primera Encuesta Virtual para Personas LGBTI realizada por el INEI (2017), un 63% manifestó haber sido víctima de discriminación o violencia, y es en el ámbito educativo donde se registra la mayoría de estos actos. La violencia hacia las personas LGTBI llega tanto desde las propias familias, como desde espacios e instituciones públicas en diferentes expresiones: inacción, indiferencia, falta de acceso a la justicia.

El Perú se mantiene entre los países más atrasados de la región ante la falta de políticas públicas y legislación que proteja a las personas LGTBI. A pesar de los múltiples llamados del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el Sistema Interamericano de Derechos Humanos y la Defensoría del Pueblo para establecer un marco de protección legal para las personas LGTBI, el Estado ha sido indiferente.

En el marco del mes del orgullo LGTBI, Amnistía Internacional saluda que el Congreso de la República permita que las organizaciones y colectivos que promueven la Marcha del Orgullo usen la Plaza Bolívar para manifestarse pacíficamente, e insta a esta institución a aprobar normas en favor de todas las personas LGTBI, concretando el ejercicio de sus derechos fundamentales y dando pasos concretos en lo siguiente:

· Aprobar un marco legal que permita el reconocimiento de los matrimonios entre las personas del mismo sexo.

· Aprobar una norma legislativa que reconozca legalmente el derecho a la identidad de género de las personas trans, y que les permita cambiar su nombre y sus indicadores de género en todos los documentos oficiales emitidos por el Estado a través de un procedimiento que respete su dignidad y que sea accesible y transparente.

· Garantizar la vigencia de legislación que prohíba todos los crímenes perpetrados contra personas o bienes debido a su real o supuesta orientación sexual e identidad de género.

· Promover y garantizar una educación con enfoque de igualdad de género.

Amnistía Internacional participará del plantón en la Plaza Bolívar frente al Congreso, que se realizará el jueves 27 de junio, y el sábado 29 de junio marchará en diferentes ciudades del país para exigir que cese la homofobia y la transfobia.

La organización invita a todas las personas a firmar la petición para exigir al Congreso peruano aprobar leyes para erradicar la discriminación y la violencia contra las personas LGBTI y garantizar sus derechos humanos.