FIRMA LA PETICIÓN
Las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI) han sido tradicionalmente discriminadas por la sociedad y el Estado. Esto les quita oportunidades para el goce pleno de sus derechos humanos, como a la vida, la integridad, salud, educación, trabajo, entre otras. A pesar de contadas iniciativas, el Estado peruano no ha establecido políticas claras para combatir los prejuicios y los estereotipos que generan violencia, discriminación y vulnerabilidad para este grupo poblacional.
Además, es necesario que se diseñen políticas de género que combatan las reiteradas agresiones físicas y sicológicas a las que están expuestas, producto de la discriminación y estigmatización que se les asigna. El Estado peruano debe concentrar sus esfuerzos en repeler estas conductas, y proveer los recursos necesarios para que las víctimas puedan realizar las denuncia respectivas, se investiguen los hechos y se encuentren a los responsables de los actos, para no generar más impunidad.
Dentro de este grupo, la población transgénero se encuentra en una situación de mayor vulnerabilidad, al no contar con un documento de identidad que refleje la identidad que se han reasignado. Esto les niega posibilidades de trabajo y por ello el 65% de las mujeres trans solo puede dedicarse al trabajo sexual. Sin un documento de identidad, el acceso a servicios básicos como salud, educación, seguridad, es casi inexistente, pues no pueden identificarse plenamente ante la institución encargada de tal servicio, recibiendo además numerosas muestras de estigmatización de parte de funcionarios públicos, autoridades y sociedad en general.
Por todo esto, le exigimos al Congreso peruano que se garantice plenamente el derecho a la identidad de las personas transgénero en el Perú. Para ello debe debatir y aprobar una ley de identidad de género que constituya el marco legal para que proteja a las personas transgénero de cualquier arbitrariedad y vulneración a sus derechos humanos. Este debe ser el punto de partida para que en el Perú se logré el verdadero goce de derechos humanos de las personas trans, que puedan ser visibles para el resto de la sociedad y el Estado, y se puedan diseñar e implementar políticas adecuadas hacia el reconocimiento y satisfacción sus necesidades.
Es momento de cambiar esta realidad.